HISTORIA de ESPAÑA




САМОУЧИТЕЛЬ ИСПАНСКОГО http://www

Hosted by uCoz
Reino de España (castellano)

 

Reino de España (castellano)
Regne d'Espanya (catalán)
Reino de España (gallego)
Espainiako Erresuma (euskera)

Lema: Plus Ultra (más allá)

Idiomas oficiales

Castellano (en todo el territorio)
Catalán (en Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares)

Vascuence (en el País Vasco y Navarra)

Gallego (en Galicia)

Occitano (en el Valle de Arán)

Capital

Madrid

Jefe del Estado

S.M. Juan Carlos I

Presidente del Gobierno

José Luis Rodríguez Zapatero

Superficie
 - Total
 - % agua

Lugar nº 50
504.782 km²
1,04%

Población
 - Total (2000)
 - Densidad

Lugar nº 29
40.037.995
79/km²

Moneda

Euro,  1868-1999: peseta

Zona horaria

UTC 0 (Canarias), +1 (Península, Baleares, Ceuta y Melilla)

(Se adelanta una hora en verano)

Gentilicio

Español

Himno nacional

Marcha Real

Dominio Internet

.ES

Código telefónico

34

El Reino de España, o simplemente España es un país que se encuentra en el suroeste de Europa, en el Mar Mediterráneo (las islas Baleares), en el Océano Atlántico (las islas Canarias) así como en el norte de África (las ciudades de Ceuta y Melilla). En su territorio europeo continental comparte fronteras terrestres con Francia y el Principado de Andorra en el norte, con Portugal en el oeste, así como con la colonia británica de Gibraltar en el sur. En sus territorios africanos, comparte fronteras terrestres y marítimas con Marruecos. Además, tiene otras serie de distritos y posesiones menores no continentales como las islas Chafarinas, el Peñón de Vélez de la Gomera, la isla Perejil y las islas del Peñón de Alhucemas, todos frente a la costa de Marruecos. La isla Alborán, las islas Columbretes y una serie de islas e islotes frente a sus propias costas completan los territorios del país.

Los límites físicos de España son, principalmente, los de la Península Ibérica, la cual comparte con Portugal. Este país y el Océano Atlántico al oeste, el Mar Mediterráneo al este, el Estrecho de Gibraltar al sur y los Pirineos, junto con el Golfo de Vizcaya y el Mar Cantábrico al norte.

El país consta de 17 Comunidades Autónomas y 2 Ciudades Autónomas que son instancias análogas a estados de una república federal. Poseen un amplio nivel de autonomía, poderes legislativos, presupuestarios, administrativos y ejecutivos en las competencias exclusivas que el estado central garantiza a cada comunidad a través de un estatuto de autonomía.

El país, siguiendo la Constitución de 1978, vigente en la actualidad, es una nación, constituida a su vez por nacionalidades y regiones. Los orígenes del estado español pueden buscarse en la unión matrimonial de los reinos medievales de Castilla y Aragón —a su vez formados por la unión de otros reinos anteriores— a finales del siglo XV durante el reinado de los Reyes Católicos, cuando se produce la unificación política completada con la incorporación militar del Reino de Navarra, el Reino de Granada y otros territorios. Un proceso de unificación institucional posterior ocurre durante el reinado de Felipe V, que configura una forma de estado centralizada que se mantiene hasta la vigente Constitución.

Los íberos fueron el primer pueblo que ocupó la península del que se tiene constancia escrita. Las últimas teorías consideran que dicho pueblo llegó a la Península Ibérica desde el norte de África cerca del siglo IX adC, asentándose fundamentalmente en la costa mediterránea y al sur, donde crearon diversas culturas de las que aún hoy se conservan restos arqueológicos de gran importancia. Entre ellas destaca la que relatos griegos llamaron de turdetanos o túrdulos y cuya ciudad fue Tartessos. Hoy está considerada como una tribu ibérica, que fundó un importante reino de gran cultura en el valle del Guadalquivir, al sur de España. Sobre el año 1200 adC, tribus celtas entraron en la península por el Norte, se establecieron en gran parte de su territorio asentándose y mezclándose con los íberos. Parece ser que las montañas en que vivía el pueblo vasco nunca fueron penetradas por ningún tipo de invasión, por lo que se considera el origen de esta población incierto, y de seguro muy antiguo, como su lengua, barajándose la posibilidad de que se tratase de una población pre-ibérica.

Alrededor del año 1100 a.C. los fenicios llegaron a la península y fundaron colonias, la más importante fue Gadir, la que hoy es Cádiz. A su vez los griegos fundaron sus colonias en el sur y en la costa mediterránea de Iberia, nombre que dieron a la península.

Durante las Guerras Púnicas entre Roma y Cartago, los Cartaginenses invadieron la peninsula. Sus colonias más importantes las establecieron en la isla de Ibiza y en Cartagena, nombre que debiera hacer referencia a la nueva Cartago. Derrotada Cartago, Roma iniciaría una paulatina ocupación de la península, que culminaría con su pleno dominio bajo el poder romano y su conversión en provincia bajo el nombre de Hispania. El nombre de Hispania deriva de Ispania y este a su vez probablemente de una palabra púnica, con el significado de tierra de conejos. Por primera vez aparece con sentido histórico en Tito Livio 59 adC, que habla de Hispania y de hispani (hispanos, con sentido unitario).

Hispania absorbe por completo la cultura romana y adopta su lengua y sus leyes, adquiriendo gran importancia dentro del imperio, incluso dos emperadores romanos Trajano y Adriano nacieron en ella. En el año 409, tribus godas invadieron la península, de las cuales sobresaldrían los visigodos, los cuales establecerían un reinado que perduraría hasta el siglo VIII.

El año 711, cuando un ejército musulmán inició la invasión de la península, convirtiéndose ésta en un emirato, o provincia del imperio árabe, llamada Al-Andalus. Los siglos VIII y XI significarían un creciente poderío musulmán, a pesar de que se forman núcleos cristianos en el norte de la península. En el siglo X Abderramán III convierte Al-Andalus en califato independiente, con independencia religiosa, siendo una época de gran prosperidad cultural, gracias a las innovaciones en las ciencias y en las letras y la especial atención que dedicaron al desarrollo de las ciudades. Las ciudades más importantes fueron Valencia, Zaragoza, Sevilla y Córdoba, la cual llegó a ser en el siglo X la mayor ciudad de Europa Occidental, contando con 500.000 habitantes, y centro cultural de la época. Sin embargo la decadencia llegó en el siglo XI, cuando comenzaron las pugnas entre las distintas familias reales musulmanas y el califato se desmembró en un mosaico de pequeños reinos de taifas.

El proceso de disolución del califato de Córdoba favorecería la progresiva expansión de los nucleos cristianos, los cuales, constituidos en reinos, arrebatarían cada vez más territorios a los musulmanes. Así, en los siglos XII y XIII, dos grandes reinos, la confederación catalano-aragonesa y el reino de Castilla reafirmarían su dominio y marginarían el poder musulmán al reino de Granada, que mantuvieron hasta finales del siglo XV, cuando los Reyes Católicos lo incorporaron a la corona de Castilla.

En el siglo XV, los dos grandes reinos cristianos peninsulares quedarían unificados mediante el matrimonio de sus dos herederos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, (los Reyes Católicos), en 1469. En 1492 el reino de Granada se incorpora al reino de Castilla y se decreta la expulsión de los judios y musulmanes que no quisieran convertirse al cristianismo. El mismo año de la toma de Granada, Cristóbal Colón llega por primera vez a América con sus naves. A ello le seguiría la carrera expansionista de la conquista de las tierras americanas, a la que se unirían posteriormente otros países como Portugal, Francia e Inglaterra. Toneladas de plata y oro se trajeron del nuevo continente y la monarquía hispánica se convierte en una de los estados más poderosos del mundo.

Tras la muerte de Isabel la Católica, en 1504, su hija Juana, casada con Felipe, al que llamaron el hermoso, hijo del rey de Austria y emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico, le sucede en el trono. Sin embargo Felipe, muere muy joven y a Juana se le incapacita por loca. Su hijo Carlos I heredaría el imperio. En su madurez decide retirarse a la vida religiosa recluyendose, en 1556 en el Monasterio de Yuste (Cáceres), con ello el imperio se desmembró dividiéndose entre los miembros de la familia Habsburgo, la española y la austriaca.

España siguió prosperando bajo la dinastía Habsburgo gracias al comercio con las colonias americanas, pero al mismo tiempo sostuvo guerras contra Francia, Holanda e Inglaterra, culminando con la desastrosa derrota de la "Armada Invencible" en 1588.

Cuando el último rey de la dinastía de los Habsburgo, Carlos II, murió sin descendencia, Felipe de Borbón, sobrino del rey de Francia, Luis XIV, le sucedió en el trono con el nombre de Felipe V. Como consecuencia de la Revolución Francesa, España declaró la guerra a la nueva república, pero fue derrotada. Napoleón tomó el poder y envió sus tropas contra España en 1808, imponiendo a su hermano José en el trono. Ello daría lugar a una Guerra de Independencia que duraría 5 años, durante la cual se elaboraría, en las denominadas Cortes de Cádiz, la primera Constitución española, promulgada el 19 de marzo de 1812, festividad de S. José, por lo que fue denominada popularmente como La Pepa. Tras la derrota definitiva de Napoleón en Waterloo, en 1815, Fernando VII vuelve al trono de España, deroga la Constitución, persigue a los liberales constitucionalistas y comienza un sistema de rígido absolutismo.

La recesión económica y la inestabilidad política fueron lógicas consecuencias tras la guerra, y España perdió sus colonias de ultramar, con la excepción de Puerto Rico, Cuba y Filipinas. Asimismo, como consecuencia de la designación como heredera de su hija Isabel II, mediante la derogación de la Ley Sálica que impedía la sucesión real de mujeres, su hermano Carlos María Isidro se rebela contra ello, dando comienzo la Primera Guerra Carlista.

La revolución de 1868, denominada la gloriosa obligó a Isabel II a renunciar al trono. Se convocaron Cortes Constituyentes que se pronunciaron por el régimen monárquico y a iniciativa del General Prim se ofrece la corona a Amadeo de Saboya, hijo del rey de Italia. Su breve reinado dio paso a la proclamación de la I República, que tampoco gozó de larga vida, aunque si muy agitada: en once meses tuvo cuatro presidentes (Figueras, Pi Margall, Salmerón y Castelar) y finalizó con el Golpe de Estado del General Pavía que disolvió el Parlamento.

Con ello se proclama rey a Alfonso XII, hijo de Isabel II. En 1885 murió Alfonso XII y se encargó la regencia a su viuda Maria Cristina, hasta la mayoría de edad de su hijo Alfonso XIII. La rebelión en 1895 de Cuba en pro de la independencia decide a los Estados Unidos a intervenir en la zona y, tras el confuso incidente de la explosión del acorazado Maine el 15 de febrero de 1898 en el puerto de La Habana, toma medidas de presión hacia España la cual es forzada a declararle la guerra. Con su derrota España perdió sus últimas colonias en ultramar.

El siglo XX comienza con una gran crisis económica y la subsiguiente inestabilidad política, con un paréntesis de prosperidad comercial relativa propiciado por la neutralidad española en la Primera Guerra Mundial. La sucesión de crisis gubernamentales, la marcha desfavorable de la guerra en el Rif, la agitación social y el descontento de parte del ejército, desembocan en el Golpe de Estado del General Primo de Rivera, 13 de septiembre de 1923, que estableció una dictadura militar aceptada por el rey Alfonso XIII, hecho este que contribuiría en cierta medida a la caida de la monarquía.

Durante la dictadura se suprimen libertades y derechos. La dificil coyuntura económica y el crecimiento de los partidos republicanos hace la situación cada vez más insostenible hasta que en 1930, Primo de Rivera presenta su dimisión al rey y marcha a París donde muere al poco tiempo. Le sucedió en la jefatura del Directorio el general Berenguer, en la denominada Dictablanda y posteriormente, durante muy breve espacio de tiempo, el almirante Aznar.

Las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 dieron la victoria a las candidaturas republicanas, lo que lleva al rey a abandonar el país y se proclama la II República. Durante la República se produce una gran agitación política y social. Durante los dos primeros años gobierna una coalición de partidos republicanos y socialistas. En las elecciones celebradas el 19 de noviembre de 1933 triunfan las derechas que gobiernan hasta 1935. Las elecciones del 16 de febrero de 1936 dieron de nuevo el triunfo a las izquierdas, agrupadas en el llamado Frente Popular. El 13 de julio fue asesinado Calvo Sotelo, jefe del Bloque Nacional, que agrupaba a monárquicos de Renovación Española y a los tradicionalistas

El 17 de julio se sublevan las guarniciones del África Española, dando comienzo la Guerra Civil y España queda dividida en dos zonas, una bajo la autoridad del gobierno republicano y otra controlada por los sublevados, denominados nacionalistas. El 1 de octubre el general Franco es nombrado Jefe de Estado de la zona nacionalista y reconocido como tal por Alemania e Italia. El apoyo alemán sobre todo y también por parte de Italia fue mucho más decisivo que el soporte ruso a la España republicana, por lo que el 1 de abril de 1939 termina la guerra con la victoria de los sublevados.

La victoria del general Franco supuso la instauración de un régimen autoritario y totalitario y el desarrollo de una fuerte represión sobre los vencidos, que obligó al exilio a miles de españoles y condenó a otros tantos a la muerte y al internamiento en campos de trabajo. A pesar de que Franco mantuvo al país neutral en la II Guerra Mundial, su no disimulado apoyo a las potencias del Eje, condujo a un aislamiento internacional de carácter político y económico. No obstante, los condicionamientos de la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética hacen que finalice el aislamiento y se produzcan los acuerdos con Estados Unidos por los que se instalaban las bases militares conjuntas hispano-norteamericanas en España. En 1956 Marruecos adquiere su independencia y se pone en marcha un plan de estabilización económica del país. En 1969 Franco nombra a Juan Carlos de Borbón, nieto de Alfonso XIII, príncipe de España, su sucesor a título de Rey.

Franco murió en 1975, siendo proclamado rey Juan Carlos I y abriéndose un periodo conocido como Transición que culmina con el establecimiento de una Monarquía Constitucional en 1978, después de la renuncia a sus derechos históricos realizada por D. Juan de Borbón, padre del rey. Tras las primeras elecciones democráticas Adolfo Suárez, del partido Unión de Centro Democrático, fue elegido presidente, introduciéndose importantes reformas políticas e iniciándose las negociaciones para la entrada de España en la Comunidad Económica Europea. Tras su dimisión en 1981, en la misma ceremonia de investidura de su sucesor, Leopoldo Calvo Sotelo, el 23 de febrero (23-F) tuvo lugar un intento de golpe de Estado, protagonizado en el Congreso de Diputados por el teniente coronel Tejero y promovido por varios altos mandos militares, que fue abortado en un día.

Las siguientes elecciones de 1982, trajeron la victoria del Partido Socialista Obrero Español, con Felipe González como presidente, que se mantendría en el poder durante las tres siguientes legislaturas. En 1985 España entra en la OTAN y en 1986 ingresó en la Comunidad Económica Europea. En 1992 España aparece de forma llamativa en el escenario internacional con la celebración de los Juegos Olímpicos en Barcelona, la declaración de Madrid como Ciudad Cultural Europea, y la celebración en Sevilla de la Exposición Universal EXPO 92. Las elecciones de 1996 concedieron la victoria al Partido Popular, con José María Aznar como presidente, cargo que ejerció hasta las elecciones generales de 2004. Esas elecciones, las cuales tuvieron lugar tres días después de un atentado cometido por Al Qaida en Madrid, dieron la victoria al Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

 

 

Hosted by uCoz




Hosted by uCoz